Síntomas del Lumbalgia
Los síntomas más usuales de la lumbalgia son:
Dolor en la zona lumbar de la espalda que puede variar de moderado a intenso.
Dolor que se extiende hacia los glúteos, la parte trasera del muslo e incluso la pelvis.
El dolor puede intensificarse con el movimiento; por ejemplo, al flexionar el tronco hacia adelante, hacia atrás o a los costados.
Contracturas de músculos de la espalda que causan sensación de rigidez y dolor.
El dolor en la espalda y las contracturas pueden ser tan intensos y agudos que llegan a afectar la postura. Podría parecer, por ejemplo, que tu cuerpo se inclina hacia un costado.
El lumbago puede causar sensaciones de hormigueo en la espalda baja, glúteos y piernas.
Acude a tu médico
Tu médico puede ayudarte a encontrar la solución para controlar el dolor en la espalda baja y prevenir futuros episodios de lumbalgia. Los tratamientos pueden incluir medicación y fisioterapia y depende de quién, otro tipo de terapias como al quiropráctica y la osteopatía.
En raras ocasiones la lumbalgia produce síntomas que requieren atención médica inmediata. Sin embargo, si tus síntomas incluyen algunos de los siguientes, definitivamente deberías buscar a la brevedad apoyo médico:
El dolor ha empeorado de una manera significativa.
El dolor no te permite desarrollar tus actividades diarias.
Debilidad o adormecimiento en la pierna o pelvis.
Debilidad, hormigueo o adormecimiento en el brazo o la mano.
Incontinencia urinaria o falta de control en los esfínteres.